Las oficinas objeto del proyecto, contaban antes de la intervención de Oreka Instalaciones, con un sistema de monitorización destinado a medir y registrar las condiciones higrotérmicas de los espacios, analizando la temperatura, humedad relativa y la calidad del aire, atendiendo a la concentración de CO₂, así como el contenido de COVs (Compuesto Orgánico Volatil).
Fruto de esta monitorización, se establecieron nuevas estrategias de ventilación y medidas de mejora, de cara a garantizar condiciones óptimas de confort y calidad del aire para los trabajadores/as, planteando como necesaria la instalación de un sistema de ventilación mecánica forzada con un recuperador de calor.
El cliente contó con la experiencia de Oreka Instalaciones para llevar a cabo el diseño y la instalación del sistema.
Primeramente, el equipo de ingeniería de Oreka, estudió el espacio, sus características geométricas y la ocupación de cada zona. Una vez recabada toda la información, dimensionaron y diseñaron la instalación, escogiendo la máquina que mejor se adapta a las necesidades del cliente.
Posteriormente, los instaladores se Oreka se trasladaron a las oficinas para realizar la instalación. En este caso, ha sido primordial la planificación de los trabajos, estructurándolos en diferentes fases para interferir lo mínimo posible en los trabajadores de las oficinas.
Tras la puesta en marcha del sistema, se regularon los caudales de cada espacio para adaptar los niveles de renovación de aire necesarios en cada zona.
Además, gracias al sistema de monitorización con el que cuenta la empresa, se ha podido verificar la eficacia del sistema instalado, demostrando que el diseño realizado ha sido un éxito.
Eficiencia y ahorro energético
El recuperador de calor instalado ha contribuido a renovar el aire de las oficinas, al mismo tiempo que mantiene una temperatura constante en cada una de las estancias.
Atendiendo a la apuesta de Oreka en pro de la eficiencia energética, el equipo instalado ha disminuido la demanda energética, siendo innecesario subir la temperatura de la calefacción para calentar ese aire renovado durante el invierno.
Por último, cabe añadir que estos equipos cuentan con unos filtros que disminuyen el grado de contaminantes, mejorando significativamente la calidad del aire, requisito fundamental del cliente a lograr tras esta instalación.
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